domingo, 30 de septiembre de 2012

Ofrece un gran concierto



Que el público entonara su fortuna y sus pesares recorriendo cantinas, despechos, muertes y amores a la par de su voz fue el logro mayor de Elisa Pérez Meza este sábado 29 en el Jardín de la Trova.  El camino fue triste, festivo o poético según la vibrante alquimia que la cantante creaba derramando su sentir en el escenario. 



Fue un concierto dedicado a José Alfredo Jiménez, el gran icono de la canción popular en México, y Elisa lo inició a ritmo de son cantando El Siete Mares para proseguir “serenamente, bajo el cielo más que azul” de El Jardín de la Trova con La Noche de mi Mal. 


Muchos asistentes, montados en un caballo alado que trotaba con las notas del Mariachi Continental, no resistieron la tentación de gritar sus emociones mientras Elisa hacía lo que sólo los grandes consiguen hacer con José Alfredo:  interpretarlo. 


Y después de cantar canción tras canción con el alma a rienda suelta, Elisa se ganó un prolongado encore cantando A la luz de los cocuyos y otras imprescindibles del repertorio del guanajuatense como No me amenaces, Alma de Acero y Si nos dejan.  Fue una noche especial con numeroso público mazatleco y foráneo que correspondió con entrega a la entrega de Elisa regalándole sus palmas de principio a fin.  


sábado, 8 de septiembre de 2012

Testimonio del Señor David Monroy

Recuerdo mucho a Luis Pérez Meza porque se presentó en Tula, Hidalgo, donde yo viví de niño, como en 1953.  Mi padre me llevó porque entonces estaba de moda La Calandria pero ya era famoso por otras canciones como El Sauce y la Palma.  Recuerdo que se presentó en una Caravana e iba alternando con Los Xochimilcas. 


Lo anunciaban muy chistoso: por todo el pueblo pasaba un camión con sonido diciendo que iba a estar El Trovador del Campo y algo como eso era todo un acontecimiento.  Mis felicitaciones al Museo de los Pérez Meza por hacernos recordar aquellos buenos tiempos.