Desde Coahuila el Sr. Ricardo Vázquez Mata nos envía el siguiente testimonio:
"Conocí y saludé a Don Luis Pérez Meza en el Distrito Federal,
en aquel reducto que se llamó “La Taberna del Greco”, ubicado en el siniestrado
e inolvidable Hotel Regis de Juárez y Balderas, cuyas instalaciones albergaba
también al Bar Capri, lugar bohemio por excelencia, donde fui despedido de mi
soltería allá por el año 1974.
"Alternaba con Don Luis otro grande del bolero, Emilio Gálvez,
quien se hacía acompañar del mariachi de don Pepe Villa. Y mientras uno nos
transportaba con su "Señora bonita" el otro nos deleitaba con sus
"Ojitos aceitunados".
"Recuerdo que un abogado amigo mío que me invitó a ver este
espectáculo me comentaba, mientras nos encaminábamos al Hotel Regis, que
Don Luis era de trato hosco y poco amigable pero que valía la pena presenciar
su recital. Nada más alejado de la
realidad, porque cuando tuve la oportunidad de saludarlo de mano recibí la
mirada de un hombre amable y amistoso.
"La presencia de Luis Pérez Meza como icono de la música
campirana y precursor de las bandas es imborrable. Solamente esa vez pude verlo
y escuchar su canto en vivo donde transmitía su recia personalidad y amor
por sus interpretaciones".